Aún persisten algunas diferencias entre las partes sobre cuánto deberían disminuir los aranceles
China y Estados Unidos están «muy cerca» de sellar la primera fase de un acuerdo comercial, afirmó el lunes el Global Times, un tabloide controlado por el Diario del Pueblo, órgano oficial del Partido Comunista, en contra de las informaciones «negativas» publicadas en otros medios.
Asimismo, Pekín sigue comprometido con la continuación de las conversaciones para acordar una fase dos del acuerdo o, incluso, una fase tres con Washington, dijo el Global Times en su cuenta de Twitter, citando a expertos cercanos al Gobierno chino.
«Básicamente, las dos partes han alcanzado un consenso básico para la fase uno del acuerdo», dijo Gao Lingyun, un experto en la Academia China de Ciencias Sociales en Pekín que es cercano a las negociaciones, según Global Times. Ambos países acordaron, además, levantar aranceles, aunque aún no han pactado ni los detalles ni el alcance de la decisión.
Expertos en comercio y personas cercanas a la Casa Blanca dijeron la semana pasada que la finalización de la «primera fase» del acuerdo, que se esperaba para noviembre, podría retrasarse hasta el próximo año, ante las presiones de Pekín para lograr reducciones arancelarias más extensas, que son contrarrestadas por nuevas demandas de Washington.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Geng Shuang, se negó a comentar específicamente el informe del Global Times durante una rueda de prensa diaria el lunes, pero reiteró que a Pekín le gustaría que Washington trabaje en conjunto para resolver las cuestiones comerciales pendientes sobre la base de la igualdad y el respeto mutuo.
Por otra parte, según responsables de ambos países, así como legisladores y expertos en comercio, el ambicioso acuerdo comercial de «segunda fase» parece menos probable antes las dificultades mostradas para llegar a un acuerdo inicial.
Las perspectivas para rubricar la primera fase se complicaron aún más la semana pasada, cuando el Congreso de Estados Unidos aprobó una legislación para apoyar a los manifestantes en Hong Kong, aunque la celebración sin disrupciones importantes de unas elecciones locales el domingo en el territorio controlado por China podría ser de gran ayuda.
El sábado, el consejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Robert O’Brien, dijo que aún es posible lograr un acuerdo comercial inicial con China para finales de año. No obstante, advirtió que Washington no haría la vista gorda con Hong Kong, aunque indicó que sería «una buena señal» que las elecciones se celebraran sin violencia, como finalmente sucedió.